130 research outputs found

    El espacio : presencia y representación

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    1 archivo PDF (315 páginas)Reflexión colectiva suscitada con motivo del Encuentro "El Espacio entre la Presencia y la Representación, de carácter multidisciplinario a propósito de uno de los instrumentos conceptuales más destacados en los años recientes en el ámbito compartido por las diferentes disciplinas de las ciencias sociales y las humanidades: el espacio. Además de la importancia que ha cobrado en estos campos del conocimiento, el espacio ha sido un instrumento de gran importancia para la práctica tradicional de la historia, si se entiende como marco material de pueblos, escenario de grandes batallas, coordenadas de travesías oceánicas, lugar de nacimiento de héroes, etcétera; y decisivo para la historiografía

    Mito y utopía para entender el Perú

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    Los humanos no hemos terminado de tomar conciencia de que vivimos en un planeta esférico. Muchos siglos después de Copérnico y Galileo, seguimos pensando como si el planeta fuese plano en términos sociales y sociológicos. Como planeta esférico, el nuestro tiene muchos centros, occidentes y orientes, nortes y sures. Consecuentemente, en su historia, el planeta ha tenido muchos sistemas mundo y muchos centros sucesivos de sistemas mundo. Si bien es cierto que el sistema capitalista globalizado actual es una economía – mundo, en la historia humana han existido muchas economías – mundo e imperios – mundo. Si aceptamos este primer enunciado, deducimos que la Europa preimperialista que conquistó América fue un rincón apartado de un mundo que tenía otros centros avanzados: Tenochnitlán, Cusco, Pekín, Bizancio, Damasco, Bagdad. Por su parte, Europa era también heterogénea y policéntrica. Fue la proyección de los mitos europeos al resto del mundo, la que le dio un halo de grandeza y universalidad. La imagen común de una Europa céntrica que habría determinado con su evolución hacia una vida cada vez mejor, llamada progreso, nuestro destino latinoamericano, puede ser cuestionada por otra imagen alternativa que reivindica el carácter multicéntrico de nuestro planeta donde todos somos a la vez centro, oriente y occidente, norte y sur. Occidente nunca fue “el centro” sino uno de los centros de un planeta multipolar. Inmersos en un planeta multicéntrico y desconectado; y llevados por el impulso bárbaro del siglo V que se prolongó hasta hoy, los pueblos de Europa convirtieron a su región en la parte privilegiada de un sistema que fue global desde el siglo XVI al aparecer el primer “sistema mundo”. Si Europa tuvo su Edad Media, no sucedió así en América. La evolución histórica y cultural de esta parte del mundo obedece a otra lógica distinta de la positivista y evolucionista en que se han basado las periodificaciones en uso que acaban ubicando a las civilizaciones americanas en un estadio inferior a las europeas. Europa, América, Asia, albergaron en momentos distintos, diferentes realizaciones colectivas humanas a las que hemos llamado civilizaciones, que no pueden ser ubicadas en niveles superiores o inferiores sino en manifestaciones distintas de igual valor humano (...)Tesi

    El Republicanismo en los albores del Absolutismo en España

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    La tesis aborda la existencia de una Escuela Republicana de pensamiento politico en la Universidad de Salamanca debido a la docencia de unos pensadores que comparten postulados comunes en torno a ideas políticas republicanas durante un espacio temporal delimitado en Castilla. Esta Escuela de pensamiento politico comienza en el año 1441 con la obtención de la cátedra en la asignatura de Prima de Alfonso de Madrigal en la Universidad de Salamanca en el año 1441, y la utilización de la obra “Política” de Aristóteles como manual de referencia en sus lecciones. En los años siguientes suceden a Alfonso de Madrigal sus discípulos Pedro de Osma y Fernando de Roa, quienes continúan sus lecciones académicas en la Universidad apoyándose en los pensadores clásicos republicanos, es decir, el propio Aristóteles, Cicerón y Salustio hasta el año 1501, último año en que imparte lección Fernando de Roa, desapareciendo las ideas políticas de esta Escuela republicana de pensamiento en la universidad castellana. Estos pensadores republicanos comparten postulados comunes en sus ideas, un gobierno de hombres libres que debe evitar cualquier gobierno regido por un tirano y que esta organización sea perpetua en el tiempo, el sometimiento a una ley igual para todos los ciudadanos y un concepto de poder político en cualquier ciudad independiente e igual en peso al poder político del monarca. Estos docentes también comparten un democratismo en su visión de la iglesia católica y proponen la preponderancia del Concilio sobre el poder único del Papa. En el plano real estas ideas políticas ayudaron en un movimiento republicano que emergió en el año 1517 desde los gobiernos de las principales ciudades castellanas contra un nuevo monarca que perseguía concentrar el poder politico de manera absoluta en las manos del monarca, Carlos V y que finalizó con la derrota del ejército de los comuneros contra el gobierno de la Corona en la batalla de Villalar ocurrida el 23 de abril del año 1521, y en el plano literario estas ideas políticas republicanas finalizaron con la publicación de la obra “Tractatus político de otras historias y Antiguedades” obra elaborada por un fraile trinitario, Alonso de Castrillo y publicada en febrero del año 1521, cuya intención era la mediación entre el gobierno de la Corona y el gobierno de las ciudades en esta guerra civil interna que se vivió en Castilla

    Humanismo y tradición clásica en España y América

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    537 p.Al dar comienzo a esta obra colectiva, que recoge veinte contribuciones interdisciplinares de la VI Reunión Científica sobre Humanistas Españoles, celebrada en León y San Pedro de Las Dueñas del 29 de mayo al 1 de junio de 2001, deseo introducir el tema del Humanismo renacentista. Hoy día los vocablos Humanismo y humanista han adquirido significaciones casi mágicas y muchas veces no significan nada. La palabra Humanismo fue creada en Alemania a principios del siglo XIX para designar el movimiento literario, artístico y filosófico que iniciaron los humanistas italianos y neogriegos del siglo XV. Los hombres de los siglos XIV al XVII utilizaron los términos “renacer”, “renovar”, “revivir”, etc. y los aplicaron a todas las manifestaciones de la cultura de su tiempo: sociales, políticas, literarias, morales, filosóficas, religiosas, artísticas, etc. El Humanismo es y puede considerarse como una parte del Renacimiento general, la que se interesa por el hombre. Para los humanistas la verdadera sabiduría es el conocimiento del hombre y el medio de lograrlo pasa por el estudio de las disciplinas que tratan del hombre
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